17.

Y es el invierno, el participe y protagonista de todas mis necesidades. Es el invierno el autor de todo el dolor que se genera aquì dentro. Y son làgrimas, perdidas que caen y se entrometen en situaciones que no deben. Y son corazonadas desalineadas que se burlan del dolor.
Y si existe algùn tipo de universo paralelo le dirìa que me quiero ir ya a allì. Que prometo no dejar rastros de vida. Y si existiera un Dios, le dirìa que me eleve y que me saque  todo este dolor, que me quite el alma y anule mi sufrir. Prometo no extrañarle a nadie ni que nadie se percate de mi ausencia.
y si alguien se interesa y me pregunta què pasò, o se de cuenta que no estoy, le agradecerìa el echo de pensar en que al mundo le es indiferente tu existencia y con tantos trastornos y problemas no existìs. Que de tantos individuos existentes justo de èl mas estùpido me tenìa que enamorar, aquel que no brinda amor si no comparte el suyo. Aquel egoìsta hombre incapaz de confiar. Aquel retrato de una tragedia inigualable. Aquel traicionero que no siente. Eh aquì los mas destructivos sentimientos que me invaden y me rodean, me cansan y me agotan.